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Wuilmer Becerra no pierde la esperanza de regresar al beisbol organizado

10/11/2019

Wuilmer Becerra Foto: AVS PHOTO REPORT

Hugo Guerrero | Prensa LVBP

Valencia.- Mucho se habló de Wuilmer Becerra en 2011, cuando fue uno de los siete prospectos del país, que recibieron bonos por siete cifras durante el proceso del 2 de julio, un récord para el país en aquel entonces. El nombre de Becerra era uno de los que despuntaban en el elitista grupo, reclutados como agentes libres internacionales por equipos de MLB.

Fueron los Azulejos de Toronto quienes dieron 1.3 millones de dólares por los servicios del caraqueño. Aunque, al año siguiente, pasó a los Mets de Nueva York en una transacción que involucró a nombres como el de R. A. Dickey, Noah Syndergaard y Travis d'Arnaud.

A partir de ese momento, Becerra entró en los planes a futuro de los metropolitanos, organización que tenía bien conceptuado al criollo. Tanto así, que en 2016, llegó a ser el séptimo mejor prospecto de los de la “Gran Manzana”. Ese fue su mejor año en Ligas Menores.

Con 25 años de edad y ocho años en el sistema de granjas de las Grandes Ligas, muchas personas ligadas a la pelota se preguntan: ¿Qué pasó con Wuilmer Becerra? Quizás, no haya una respuesta concreta, ni el propio jugador conoce a ciencia cierta lo que le ha pasado en los últimos dos años, período en el que ha estado fuera del beisbol organizado.

“El beisbol a veces es un sube y baja”, opinó el bateador derecho, que le atribuye a las lesiones buena parte de su lejanía a las Grandes Ligas. “Yo cumplí mi séptimo año en la organización y se me acabó el contrato, entonces no me quisieron renovar. Las lesiones quizás han influido en tener un buen año o dejar de jugar durante un año”, consideró el toletero, que fue operado del hombro derecho en 2016.

Ahora, el popular “Wuilmito”, seudónimo usado por sus allegados para diferenciarlo de su padre Wilmer Becerra, quiere pasar la página y volver a lograr un contrato que lo acerque a su sueño de jugar en las Mayores. Pero, sabe que, para eso debe trabajar en un aspecto del juego que los Mets pretendían que desarrollara y destacara.

“Debo dar más jonrones y dobles. Eso era lo que me pedían los Mets de Nueva York, cuando estaba en su roster de Grandes Ligas. Ellos me decían que querían que yo fuera un jugador de jonrón y dobles, quizás por eso me costó firmar con otro equipo porque era un pelotero de dar más sencillos y me faltaba ese extra, que era sacar la pelota”, explicó el jardinero que, no pierde las esperanzas de regresar al beisbol organizado.

“La fe es lo último que se pierde, por eso estamos aquí trabajando y jugando todos los días. Primero debo demostrar que estoy sano y que puedo hacer los ajustes que las organizaciones le piden a uno”, consideró Becerra.

Su actuación con los Navegantes del Magallanes en la actual zafra, puede ser una buena prueba para que el guardabosque alcance lo que desea. Hasta ahora, está demostrando que puede ser una campaña importante para él, con .316 de average, tres dobles, un jonrón y dos empujadas, antes del cierre de la primera semana de campeonato.

“Esto es gracias a la salud, eso es lo primordial para mantenerme jugando. El trabajo día a día ha sido importante, poniendo un extra en las prácticas para que en el juego salgan las cosas con más fluidez”, reflexionó el capitalino, que aspira a regresar en 2020 al beisbol organizado.

“Me visualizo con un contrato con algún equipo. Quiero es que me den la oportunidad. Al darme el chance haré hasta lo imposible para no desaprovecharlo”, exclamó.

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